El Día Mundial contra el Cáncer nació el 4 de febrero del año 2000 en el marco de la Cumbre Mundial contra el Cáncer para el Nuevo Milenio que se llevó a cabo en París, Francia con el objetivo de aumentar la concientización sobre la importancia de la detección y tratamiento oportuno de la enfermedad[1].

El cáncer es un padecimiento que se presenta cuando los cambios que se producen en un grupo de células del organismo generan un crecimiento anómalo e incontrolado que da lugar a un bulto llamado tumor, lo que  ocurre en todos los tipos de cáncer a excepción de la leucemia (cáncer de la sangre) [1].

El sarcoma, la leucemia, los carcinomas, linfomas y mielomas, así como los cánceres cerebrales y de la médula espinal son los principales subtipos de esta enfermedad [1] y, si no se diagnostican y tratan oportunamente, la posibilidad de que se extiendan a otras partes del cuerpo aumenta, generando complicaciones mayores para la salud [1].

El consumo de alcohol y tabaco, el sobrepeso, los malos hábitos alimenticios, el sedentarismo y los antecedentes familiares de la enfermedad son algunos factores de riesgo para su desarrollo [1].

En 2018 más de 18 millones de personas en el mundo fueron diagnosticadas con cáncer: de ellas, 9.5 millones fueron hombres y 8.5 millones mujeres. Ese mismo año más de 9 millones de pacientes perdieron la batalla contra este terrible padecimiento [2].

En México la tasa de mortalidad por cáncer asciende a más de 153 personas por cada 100 mil habitantes, siendo el cáncer de mama, de próstata, colorectal, de tiroides y cervicouterino los de mayor incidencia en la población nacional [2].

Actualmente existe una gran variedad de tratamientos contra el cáncer –como la cirugía, la quimioterapia, la radioterapia, el trasplante de órganos y tejidos, la inmunoterapia, el tratamiento hormonal y los tratamientos farmacológicos dirigidos– que el médico eligirá para cada paciente dependiendo de diversos factores como el tipo y estadio de la enfermedad, así como el estado de salud en general del paciente [3].

Dentro de su portafolio, PROBIOMED cuenta con productos para controlar tanto diversos tipos de cáncer como las complicaciones asociadas a su tratamiento brindando al paciente una mejor calidad de vida.

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